sábado, 25 de enero de 2014

Reseña de "Cota diecinueve" en el blog "Yo, yo misma, Irene"

En el blog Yo, yo misma, Irene, acaba de aparecer una reseña de mi novela "Cota diecinueve", que podéis leer pinchando aquí.

Antes que nada, darle las gracias a Irene, la administradora del blog, por leer el libro, y cómo no, por la buena opinión que le ha merecido.

Siempre me gusta hacerme eco de las reseñas que se publican de mis novelas, pues me permiten comentarlas, hablando de aspectos que tal vez no habían salido a la luz hasta que llaman la atención de sus lectores, dejándonos su opinión para que todos podamos conocerla.

Irene comienza hablando del book-trailer y la portada. Cierto es que con el tema de las portadas no suelo estar demasiado acertado (quizás sólo salvo "Enarmonía"), y ya sabemos que a veces se juzga un libro por ellas, pues son tantas las opciones que tenemos, que en algo debemos basarnos para decantarnos por una u otra obra.

Los book-trailers me permiten desarrollar una de mis aficiones, que es la creación de videos. Por supuesto soy sólo eso, un aficionado, pero intento siempre alejarme del típico trailer que más parece una presentación de power point que un video. Creo que no basta con buscar unas cuantas fotografías en internet, ponerle una música de fondo, y salpicarlo con subtítulos de citas extraídas de la novela.
Por supuesto, tengo que hacer una mención en este apartado a tantas personas que han colaborado conmigo poniendo sus voces o interpretaciones en mis videos promocionales, siempre de forma desinteresada.
La verdad es que me gusta eso de lanzar una propuesta al mundo, y descubrir la gran cantidad de talento que se oculta al otro lado de la pantalla del ordenador. Muchas gracias a todos aquellos que alguna vez han querido colaborar para hacer posible esos book-trailers.

Respecto al tamaño del libro (396 páginas), supongo que depende un poco del tamaño de la letra, y de la hoja. Comparándolo con el resto de mis novelas, "Cota diecinueve" se encuentra en la media, que para hojas A4 a doble espacio (como lo piden las editoriales y los concursos), son unas 250 páginas. Decir que "El tercer final", mi novela de romanos, tiene alrededor de 350 en el mismo formato. De todos modos, que no se haga pesada es buena señal, pues indica que lo que se narra tiene su interés.

Le comentaba a Irene en la entrevista que me hizo, y que publicará próximamente, que ya un amigo me avisó de que durante la primera parte del libro, la que sirve de introducción, pasan pocas cosas. Ella es de la misma opinión, y no seré yo quien les lleve la contraria, pues cualquiera que lo lea creo que coincidirá con ellos. Supongo que es la calma que precede a la tormenta, porque os aseguro que luego hay rayos y centellas.

Me alegro de que Irene haya experimentado el terror a través de la  novela, pues es lo que todo autor busca con una obra de este género. Imagino que quien se embarca en su lectura también debe alegrarse por ello, pues leer una obra de terror que no asusta es como beber un refresco con burbujas al que se le ha ido el gas.
Desde el momento en que comienza la acción, me esforcé porque no se detuviese, que fuese una sucesión de despropósitos sin fin, provocando el desasosiego en el lector. Tampoco he ahorrado en detalles sangrientos, gore en ocasiones. Digamos que no es apto para todas las edades.

El protagonista de la obra, Santiago Cota, ha terminado cayéndole en gracia a Irene, aunque al principio la dejase fría. Lo cierto es que no se trata del hombre más carismático que te puedas echar a la cara, pero tras compartir con él tantas penurias, lo mínimo es que le invites a tomar algo al terminar, que el pobre se lo ha ganado.

El final es uno de los peros que le encuentra Irene a la historia. Cuando lo escribí lo vi muy claro, y en ningún momento tuve alguna duda en relación a que le faltase algo, pero muchas veces el autor se equivoca, pues nunca podrá ver su obra como lo hace alguien que llega a ella sin conocerla de antemano. Es algo que siempre digo: me gustaría poder leer mis novelas sin saber nada de ellas, pero eso resulta imposible. Cuando las leo, ya sé cómo acaban, y qué va a pasar, por eso mi visión de ellas resulta poco objetiva, y mi opinión no es la mejor.

En definitiva, a Irene le ha gustado la novela, lo cual supone para mí una alegría. Os invito a visitar su blog, leer sus reseñas, dejarle comentarios, y si os apetece, leer "Cota diecinueve" para ver si compartís su opinión.

Muchas gracias, Irene, y gracias a todos los que os pasáis por este blog de vez en cuando.

1 comentario:

  1. Muy buenas.

    En primer lugar darle las gracias por esta entrada y en segundo lugar... las gracias usted por haberme hecho pasar tan buenos momentos leyendo "Cota diecinueve" (bueno, eso de buenos momentos entre comillas... como ya dije en mi reseña realmente hubo momentos, por no decir gran parte de la historia, que llegué a sentir verdadero pánico...).

    Como bien dice mi único pero ha sido el final, pero porque realmente soy de las que les gustan un final feliz y cerrado, vamos... el típico previsible...; supongo que su final es el que mejor se adapta a toda la historia, pero como yo soy como soy... jeje.

    En definitivas, que muchas gracias por todo y estoy segura de que pronto volveré a leerle.

    Un beso.

    ResponderEliminar

Gracias por tus pensamientos



Subir